El rostro uno de los
sitios predilectos para el cuidado de la piel femenina: arrugas, ojeras,
manchas y otras imperfecciones generadas por el tiempo, son puntualmente
atendidas.
No obstante, la
dermatóloga Mary Carmen Sánchez, afirma que la piel de todo el cuerpo envejece
a partir de los 20 años, y sólo un número reducido de mujeres le brinda
cuidados especiales a sus manos, las cuales son un reflejo inquebrantable del
paso del tiempo.
Por tanto, “la piel de
las manos refleja no sólo tu edad, sino también tu ocupación y las decenas de
actividades que diariamente llevas a cabo. Así que es fundamental cuidarlas”,
explica Sánchez.
“Conforme envejecemos,
la piel de las manos se ve menos tersa, suave y elástica; incluso adelgaza al
tiempo que los vasos sanguíneos y los ligamentos que la integran se vuelven más
evidentes. La grasa se va atrofiando y la mano se ve con un aspecto más
esquelético”, puntualiza la experta.
Entre las lesiones
comunes de la piel por el paso del tiempo están: pecas, diversos tipos de
queratosis (manchas), arrugas, pérdida de la lozanía y reducción de la
hidratación, entre otros.
Para prevenir el
reflejo del paso del tiempo, la dermatóloga recomienda utilizar cremas
humectantes para evitar que la piel se deshidrate, agriete y cause dolor. Así
como aplicar filtro solar durante el día, para evitar el daño del sol.
Estamos en una época
del año en la que las manos sufren especialmente por el frío, provocando que se
resequen creando un tacto nada agradable. Por ello, la crema nutritiva y
reparadora de manos de Arahí, fabricada a partir de ingredientes naturales, es
la solución perfecta para incluirla en tu rutina de higiene y cuidados de la
piel, asegurándote que ni el frio ni el calor dejarán efectos en tus manos.
Fuente: salud180.com