A todos/as nos gusta
estar morenitos/as, más en esta época del año, pero hay que pensar en las
consecuencias de querer lucir ese tono de piel, pues la exposición al sol es
uno de los factores más perjudiciales, no sólo la envejece, sino que podemos
contraer alguna enfermedad grave. Por eso, hacemos un llamamiento desde aquí a
la precaución y al cuidado adecuado de la piel.
Que todos/as a lo largo
de nuestra vida nos hemos puesto un poco rojitos, es normal viviendo en la
tierra del sol y teniendo en cuenta que cualquier día de invierno – primavera
te sorprende con un sol radiante de 30 grados y te pone “coloradito”. Sin
embargo, y aunque es necesario el uso de crema protectora a lo largo de todo el
año y no sólo en verano como la mayoría pensamos, en esta época estival es
obligatorio su uso frecuente. A continuación te contamos algunas curiosidades
que debes saber para protegerte del sol:
El factor de protección
solar (Sun Protection Factor - SPF) es lo que habitualmente tenemos en cuenta a
la hora de comprar un protector u otro. Es una medida sobre cómo te protege la
piel contra los rayos ultravioleta B (UVB) un protector solar. Por lo general,
el número se explica como la cantidad de tiempo que le toma a la piel de una
persona quemarse cuando está cubierta con protector solar, en comparación con
una piel no cubierta. Por ejemplo, un SPF 30, en teoría, te permitiría quedarte
en el sol 30 veces más tiempo que lo que podrías hacerlo sin protector. Esto
significa que si generalmente tu piel se quema en 15 minutos, utilizar un SPF
30 extendería ese tiempo a 7 horas y media.
De cualquier forma todo
lo relacionado con el SPF es relativo, en primer lugar porque los estudios
realizados cada año sobre gran cantidad de cremas demuestran que buena parte
ellas no cumplen realmente con el factor SPF que dicen contener. Además, el
sudor corporal, los baños, etc., hacen que realmente el protector no esté
actuando en su totalidad como debería. Por eso, lo recomendable es renovar la
aplicación de protección aproximadamente cada 2-3 horas.
¿El mensaje con el que
debes quedarte? No dependas únicamente del protector solar para cuidar tu piel.
Hasta los mejores protectores solares deberían ser considerados solo como una parte
de un régimen comprensivo de protección contra el sol. Y no pienses que volver
a aplicarte protector de forma meticulosa te permite quedarte en el sol más
tiempo, tu mejor opción es cubrirte, usar un sombrero y buscar la sombra, sobre
todo es horas punta de radiación.
No olvides que la piel
tiene memoria. No se trata de lo mal que lo pasas cuando el sol te quema
durante los días siguientes, sino que según los estudios relacionados, las
quemaduras hacen estragos a partir de los 40 años. Dato curioso: En promedio,
tu riesgo de desarrollar melanoma se duplica si has tenido más de 5 quemaduras
de sol.
No es broma, lucir la
piel morena a toda costa no es conveniente, mejor disfruta del verano
protegiéndote del sol, tu piel te lo agradecerá aunque tenga un tono más
blanquito.
Fuente información: www.laopinion.com
Fuente foto: AECC
b3proshop.com
ResponderEliminarAntes de adentrarte en la brisa del surf, el protector solar es tu mejor aliado. Protege tu piel de los rayos intensos, asegurando olas sin quemaduras y diversión segura.